El Reino Unido da el primer puntapié contra las multinacionales con su “impuesto Google” (tal su denominación popular), una tasa que grava el 25 % de las utilidades obtenidas en dicho país como resultado de las actividades económicas de dichas empresas. ¿Qué se busca con esto? Evitar que las grandes empresas multinacionales se aprovechen de sus estructuras financieras complejas para liquidar sus ganancias en otros países donde la presión fiscal es menor, y así pagar menos impuestos.
[Tweet “Evitar que las grandes empresas multinacionales se aprovechen para liquidar sus ganancias en otros países con menor presión fiscal.”]
¿Por qué “impuesto Google”?
Google ha sido la empresa más conocida que ha hecho esta maniobra para evitar pagar tributos por el total de sus ganancias obtenidas en el Reino Unido. A modo de ejemplo: en el 2013 Google tuvo ingresos por £3400 millones pero, gracias a maniobras de desvíos artificiales hacia países como Irlanda, sólo pagó cargas fiscales por el valor de £20,4 millones. El país destino de estas maniobras por excelencia es Irlanda del Sur, que tiene un impuesto de sociedades del 12,5 %. Si comparamos con Irlanda del Norte (21 %) entenderemos por qué muchas empresas británicas, españolas y estadounidenses instalan sedes en Irlanda del Sur.
Si bien mencionamos al gigante de Internet, Google, Starbucks, Facebook, Amazon y Apple (entre otras empresas) también están en la mira del secretario del Tesoro inglés, George Osborne.
Osborne ha sido claro con su conferencia de otoño: “Ofrecemos una de las cargas fiscales más bajas del mundo para atraer a los negocios, pero esperamos que esos impuestos se paguen“. Es decir: se mantendrán las condiciones para que Inglaterra continúe siendo atractiva a las empresas del mundo pero las fiscalizará de manera profunda para evitar que evadan impuestos.
Cabe recordar que este anunciado impuesto Google entraría en vigencia en el primer trimestre del 2015. Se sospecha que será antes de las elecciones de Mayo en caso de superar el primer trimestre. Al ser un año electoral se busca dar golpes de efecto sobre la ciudadanía y nada mejor que un impuesto que quita a “los ricos” para dárselo a los “pobres”.